El doctor Ramón Perlata Martínez presentó en Vitoria su último libro: «COMUNIDAD IBEROAMERICANA: Formación y destino de una comunidad de naciones«. El acto fue organizado por Unidad hispanista y presentado por Ernesto Ladrón de Guevara,
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Leo en el cartel de la foto, detrás del presentador, «la división lleva a la esclavitud».
Seguro que en todas las civilizaciones existe alguna frase como esta, o incluso alguna lección histórica, porque la realidad es que el ser humano es un animal grupal (y jerárquico ). Eso está en nuestros genes como especie. El ser humano, para ser efectivo y sobrevivir necesita trabajar, vivir juntos.
Por tanto la unión nos hace más fuertes y desunidos, más débiles.
En occidente tenemos presente desde los griegos la fábula de Esopo «el viejo y sus hijos» (las varas que juntas en un haz es irrompible, pero que cada vara suelta es fácilmente rompible.
Así dice el viejo a sus hijos («que se llevaban mal entre si») después de enseñarle lo que pasa con las varas:
«De esta manera, hijos míos, si estáis todos unidos nadie podrá venceros; pero si estáis divididos y enemistados, el primero que quiera haceros malos, os perderá».
Lo que no pudieron hacer los ingleses con sus guerras e invasiones, para poder tener un mercado de gustos europeos con mucha plata pura para pagar, lo hicieron directamente a través de la masonería apoyando con dinero y armas a los desleales, perjuros y traidores.
Se fabricaron sin esfuerzo un montón de colonias comerciales en nombre de la «libertad, igualdad y fraternidad» para poder saquear a voluntad siempre enfrentadas entre si. Son las proverbiales repúblicas bananeras.
Así divididos, Estados Unidos pudo invadir y robar sin esfuerzo al México «libre» y solo más de la mitad de su territorio. Eso hubiera sido impensable pocos años antes del desastre.
Por eso el editor de ese Esopo citado, remata el cuento:
«Enseña esta fábula que la unión hace fuertes a los débiles y que la división hace débiles a los fuertes».
Hasta que no nos volvamos a unir, seguiremos siendo débiles.
Seguiremos siendo el patio trasero de los Estados Unidos.
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La Comunidad de naciones Iberoamericanas es una realidad.
Pero ¿qué dirán Estados Unidos, Inglaterra y Francia ?
Nos quieren desunidos, enfrentados y pobres.
Porque saben por la Historia que somos un rey león indomable.
Siguen con la masonería la vieja táctica tan efectiva del divide et impera.
Sólo que, estando avisados, debemos tener cuidado para que no nos sigan dividiendo más y evitemos así que nos sigan imperando y robando mejor.
(Por cierto: ¿qué pasa con Filipinas, Guam y Palaos? . ¿o es que no son naciones hispanas?)
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