Los cuerpos de voluntarios peninsulares y entre ellos el de catalanes jugaron un importante papel militar en la Guerra de los Diez Años ( 1868- 1878), la primera guerra de Cuba. Las operaciones contrainsurgentes eran constantes. En octubre de 1870,  una columna de contraguerrillas, formada por Voluntarios Catalanes y de la brigada de la Reina se puso en marcha para intentar localizar un importante campamento rebelde en la zona de Vista Hermosa.

Mandaban a los catalanes en esta importante  expedición el capitán Champaner, el entonces capitán SanFeliu, (del que ya publicó Somatemps un magnífico artículo hace tiempo) y el capitán Ibar Garcia.

El 10 de octubre la fuerza localizó el campamento en un inaccesible paraje entre un acantilado  y el río Zaramaguacan, cerca de la localidad de San José del Vijabo. Aquella noche, 120 soldados españoles entre ellos 60 voluntarios catalanes se descolgaron por la empinada pendiente sobre el campamento en una acción casi temeraria.

Se produjo un pequeño desprendimiento y algunos soldados cayeron al vacío pero la gran mayoría pudo alcanzar su objetivo sorprendiendo a los guerrilleros cubanos. Se inició una terrible lucha con carabina y arma blanca entre españoles y cubanos. Unos gritaban Viva España, otros vitoreaban a Cuba libre. Pero los cubanos, sorprendidos, llevaron la peor parte. 35 de ellos murieron y un número aun mayor cayeron al río y se ahogaron.

Se capturaron grandes cantidades de armas, documentos y se quemaron muchas  tiendas de campaña de los rebeldes. Las tropas españolas tuvieron muchas menos bajas. Fue un éxito basado en la audacia y el valor. Los Voluntarios Catalanes tuvieron gran parte en ello.

Rafael Maria Molina. Historiador.

Fuente: Historia de la  Insurrección y Guerra de la isla de Cuba. Eleuterio Llofriu. Volumen 3. 1871.