La Agencia Catalana de Consumo, organismo dependiente de la Generalitat, ha admitido a trámite una denuncia de la Plataforma per la Llengua contra Playmobil y Lego. Como consecuencia, ha iniciado un expediente de diligencias previas para investigar el caso.
La Agencia Catalana de Consumo, en un escrito remitido a la asociación en defensa del catalán, ha concluido que, en el marco de la seguridad jurídica, “finalmente se dan las circunstancias adecuadas para aplicar la ley, una vez aclaradas las dudas en virtud de las sentencias del Tribunal Constitucional”.
De acuerdo con la legislación actual, Playmobil y Lego se enfrentar a una multa de entre 10.001 y 100.000 euros, en función de lo establecido en el artículo 332.3 de la Ley del Código de Consumo. La Plataforma per la Llengua considera que ambas multinacionales están vulnerando la normativa autonómica, que obliga a etiquetar al menos en catalán cualquier producto que se ponga a la venta al público en la región.
Pues nada, más empresas que no querrán saber nada de Cataluña, pues a estas alturas a ver quien se pone a enseñar a hablar a tanto playmóbil suelto por el mundo.
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somatemps.me 
A este paso, parece que la Generalitat va a atacar todo aquéllo que no esté rotulado de manera exclusiva en catalán. La realidad es que, en Catalunya, el 55 por ciento o más de la ciudadanía tiene el castellano como lengua habitual y el problema sería, de entrada, que se dejaría a estas pobres personas sin la posibilidad de tener, por ejemplo, las instrucciones de un juego de Play,obil, como es el caso que nos ocupa, en la lengua común de todos los españoles. La intransigencia del Govern es antidemocrática
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Tranquilo, las instrucciones están en castellano i podrás montar lo que quieras. Pero también podrían estar en catalán. Por qué no? Si se vende en Cataluña, que se respeten, como mínimo, los dos idiomas que son oficiales allí. La intransigencia no es del govern. Creo que es tuya. Piensa un poco y, si puede ser, sin odio.
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