El pasado julio, Miquel Calzada (ahora «Calçada»), anunciaba que dejaba todos los cargos y las acciones del grupo Flaix, que cuenta con 21 licencias de radio, con la intención de asumir «responsabilidades de gestión pública».

En diciembre, completó su retirada empresarial, con la salida del consejo de administración de Media Manga Mangotiere, pero todavía está a la espera de un destino en el ámbito político o de la administración.

Fuera de los consejos de administración

En el programa El món de RAC1, a una pregunta de Jordi Basté contestó que le gustaría entrar en la gestión y que «lo dejé todo bien atado el mes de junio para encarar las elecciones del 27-S».

Con la expresión «dejarlo todo bien ligado», se refería a la salida de sus empresas de comunicación. Ya no figura en ningún consejo de administración. También ha abandonado su despacho en el número 55 del Paseo de Gracia, la sede del grupo Flaix.

Más endogamia: Carles Cuní

Con la salida de Miguel Calzada del grupo Flaix, todo queda en manos de su socio, Carles Cuní, el hermano menor del periodista Josep Cuní, el conductor del magazin 8 al dia (8TV). Y es que Cataluña es una gran empresa familiar (de unos pocos).

Categorías:POLÍTICA