Más de 15.000 personas han firmado una petición en la plataforma Change.org para que el grupo Inditex retire o tape unas pinturas plasmadas en la tienda de Zara en la Plaza Cataluña en Barcelona. La obra fue realizada por el pintor Miquel Farré i Albagés en el 1952 (cuando el edificio era propiedad del banco de Bilbao).

El promotor de la petición, cubano residente en España, ha denunciado que «las imágenes representan la humillación de personas por motivos étnicos» y “Glorifican el pasado esclavista, poniendo en valor la riqueza y el dinero obtenido con la explotación de seres humanos y humillan a los esclavos por la forma en la que los retratan”, ha asegurado.

Al respecto, decir unas cosas:

-Menos mal que los murales son de un catalán ya fallecido.

-Las representaciones de los murales no son racistas. El «racismo» está en el ojo del que quiere ver lo que no hay.

-Si seguimos que seguir haciendo caso a la dictadura de la corrección política, hemos de suprimir la mitad de las obras de arte del mundo. Ah,, y eliminar todas las reproducciones de «Lo que el viento se llevó».

-Si Cuba aceptó su independencia de España, ya lo han pagado caro con medio siglo de comunismo y pobreza.

El señor que protesta haría bien en dedicar sus energías a denunciar el régimen comunista cubano y no un mural de los años 50 del siglo XX, realizado por un artista que nunca supo lo que era el racismo como «categoría posmoderna».

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