Con motivo de la Solemnidad de San José, Día del Padre, la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) en España ha lanzado una campaña en más de 400 marquesinas, autobuses, metros y lonas en más de 60 ciudades con el lema «¡VIVAN LOS PADRES!»
«Padre Nuestro, que estás en el Cielo…». El Padrenuestro luce en 375 carteles instalados en autobuses, metros y marquesinas de 61 ciudades españolas. En la nueva campaña el objetivo es celebrar la festividad de San José, el Día del Padre, y reivindicar la figura de tantos hombres que -como el santo- hacen cada día lo imposible para cuidar de su familia.

¿Que supone para usted crear una nueva campaña con tanta visibilidad en las ciudades, en este caso en defensa de los padres, de San José y de Dios Padre?
Es una gran alegría que haya una asociación dispuesta a hacer este tipo de campañas, como la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), para acercar el mensaje del Evangelio a la vida pública. Para mí es un honor poder participar en estas campañas. Hay que agradecer que haya alguien dispuesto a normalizar lo normal, a dar testimonio de lo verdadero, de lo bello y del bien.
En estos tiempos en los que quieren imponer un feminismo agresivo, que solo habla de los derechos de la mujer, es importante reivindicar la figura del padre, la paternidad.
El año pasado ya hicimos el Día de la Mujer la campaña del Ave María para ensalzar a la Virgen como modelo de mujer y este año hemos querido destacar a San José como modelo de hombre, modelo de padre. Hemos aprovechado la fiesta de San José para celebrar como se merece el Día del Padre, en un momento en donde parece que no existe San José, que es una paternidad robada y su figura es despreciada. Por eso era importante celebrar el día de San José y hablar del papel de los padres. Una familia sin padre no es plena.
En esta ocasión el slogan es muy claro y directo, aunque quizá parezca menos original aparentemente, pero está buscado estratégicamente para generar un fuerte impacto.
Es que al final no hacen falta cosas muy rebuscadas, sino cosas muy sencillas. Aprovechamos el día de San José, que es el Día del Padre, para reivindicar la figura del padre, con una campaña a favor de los padres y una oración para encomendarnos a nuestro Padre del Cielo, que da pleno sentido a la palabra paternidad. Es nuestro padre común y ojalá nos ayude a todos los que somos padres a parecernos un poco más a San José.
¿Cómo contribuyen estas campañas a reivindicar los derechos de Dios y a que los valores católicos estén presentes en la sociedad?
Es importante por un lado colocar una oración en un lugar público. Es vital no dejar de creer en el poder de la oración, pues se ha demostrado que la oración funciona y que es capaz de parar guerras y esto, en un momento como el que estamos viviendo, nos viene bien recordarlo.
La oración en el espacio público es un bien social y estamos encantados de poder contribuir a este bien. Como te decía al principio, ayuda a normalizar lo que es normal, celebrar la paternidad, celebrar a los padres, dar gracias a los padres por todo lo que hacen por sus hijos. Todos los padres que conozco, son imperfectos como yo, pero todos quieren hacer bien las cosas con su mujer, con sus hijos y con su familia. En resumen estas campañas ayudan a perder el miedo a defender cosas que son buenas, bellas y verdaderas.
Por Javier Navascués
Categorías:ENTREVISTAS, RELIGIÓN
Efectivamente.
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Para darse cuenta de la figura del padre, no hay más que ver lo que pasa en Estados Unidos con la población negra:
El 70% de las familias solo tiene la madre, por el padre se ha largado. Ha abandonado la familia.
Esto son cifras oficiales y se estudian en sociología por las consecuencias que tienen.
El 70% es muchísimo y parece que en esa comunidad ya lo consideran normal; es decir que el niño negro abandonado tarde o temprano imita al padre y abandonará a su mujer y sus hijos.
Las consecuencias, a parte de la sensación de rechazo que sienten los hijos («mi padre no me quiere»; «yo no valgo»…) y que lleva naturalmente a las drogas y al fracaso, es que abandonan los estudios, porque para estudiar es necesario estabilidad durante años para poder concentrarte en ellos. Como solo entra un sueldo
-el de la madre- o la ayuda social, que siempre será una limosna, el buen hijo tendrá que dejar de estudiar y trabajar en empleos con poco valor añadido y por tanto poco pagados (lo que llaman «dead end jobs»)…
Es muy normal que el joven acabe en pandillas callejeras dedicado al pequeño hurto y enganchado con las drogas o el alcohol.
Es decir, es un círculo de pobreza del que es imposible salir.
Sin embargo esto no ha sido siempre así:
Todo empezó con el Estado del Bienestar, que te paga por no trabajar.
(por cierto, que todo esto lo dice el profesor de economía de raza negra Thomas Sowell -tiene libros y videos en youtube- y al que naturalmente le preocupa su comunidad racial)
Ahora bien, si se sabe todo esto, ¿por qué no se arregla?
Porque los políticos nos quieren pobres y necesitados para que les votemos a cambio de las ayudas sociales.
Así por ejemplo, para el multimillonario SOROS, que financia la organización marxista Black Lives Matter, el «problema» es el racismo institucional blanco y cristiano y no que estas personas no saben ganarse la vida (y por tanto no tienen un oficio digno, porque en su momento sus padres les abandonaron y no pudieron aprenderlo o fueron con malas compañías)
Como se ve claramente, el padre es una figura esencial para un adulto sano (y la madre también) y feliz.
Y como también se ve muy claramente, a los políticos no les interesa que tengamos padre, porque nos quieren en la calle, drogados y sin trabajo o con trabajos basura; única manera de que nos puedan comprar a cambio del voto.
Por tanto se imponen tres conclusiones:
1) no hacer caso estos corruptos políticos, que solo quieren nuestro mal, a cambio del voto.
2) que hay que dar gracias a nuestro padre (sí, hágalo ahora), porque si somos algo en la vida ahora es en gran parte gracias a él (que no está obligado)
3) que de cada uno nosotros y del ejemplo que demos depende el bienestar de nuestros hijos y el funcionamiento normal de la sociedad donde vivimos.
La democracia no es para vivir peor, sino para vivir mejor. Todavía no nos hemos enterado y llevamos así más de 40 años.
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Muy interesante su comentario y su información.
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Es un texto denso, cargado de afirmaciones ideológicas, políticas y sociológicas. Para darte una opinión profesional y honesta, voy a dividir el análisis en tres partes:—🔍 1. Análisis crítico del contenido: El texto mezcla datos sociológicos reales, opiniones personales e interpretaciones ideológicas. Algunas afirmaciones tienen una base que podría ser debatida con matices, pero muchas otras incurren en:Generalizaciones excesivas: Por ejemplo, decir que «el 70% de las familias negras están sin padre» y que eso lleva inevitablemente a drogas, fracaso o pobreza no solo es estadísticamente impreciso, sino que reduce una realidad compleja a una explicación simplista y estigmatizante.Culpabilización cultural y racial: Se insinúa que la causa del problema es una supuesta “falta de valores” o ausencia del padre, sin considerar factores estructurales como el racismo sistémico, la desigualdad histórica, las políticas carcelarias o las fallas del sistema educativo y laboral.Tono ideológico fuerte: El texto adopta una posición antipolítica, antiayuda social, antiderechos civiles, y ataca directamente movimientos como Black Lives Matter o personas como George Soros, con un lenguaje que roza lo conspirativo (hablar de que los políticos quieren a la gente drogada y en la calle para comprar su voto).—⚠️ 2. Riesgos del discursoEste tipo de narrativas pueden parecer atractivas porque simplifican problemas muy complejos (pobreza, abandono escolar, marginalidad) en una única causa: la falta del padre. Pero hacerlo sin evidencia sólida, ni perspectiva social amplia, lleva a:Estigmatizar a comunidades enteras (en este caso, a la población negra de EE.UU.).Culpabilizar a las víctimas en lugar de analizar causas estructurales.Promover una ideología que reemplaza análisis científico por opiniones ideológicas disfrazadas de sentido común.—🧭 3. ¿Tiene algo rescatable?Sí. Hay una intuición válida en la preocupación por la figura del padre ausente como un factor que puede impactar negativamente en el desarrollo emocional de los hijos. Muchos estudios coinciden en que tener referentes parentales estables influye en la salud mental y el futuro académico. Pero:Esto no es exclusivo de la comunidad negra ni se puede generalizar en esos términos.La solución no es eliminar las ayudas sociales, sino mejorar las condiciones estructurales que impiden a muchas personas criar a sus hijos en estabilidad.Además, el rol del padre no es superior ni más “valioso” que el de la madre. Ambos son importantes, y también lo son otras formas de crianza y cuidado.—🧠 Conclusión personal y profesional:Este texto es un ejemplo claro de cómo una ideología política puede usar argumentos parciales o distorsionados para promover un mensaje reaccionario. No es un análisis riguroso ni justo. Contiene elementos clasistas, racistas, antifeministas y antidemocráticos disfrazados de preocupación social.Si estás interesado en comprender en profundidad los problemas de marginalidad, abandono parental, racismo estructural o el impacto del Estado de Bienestar, puedo recomendarte textos de sociología crítica, economía social o estudios culturales mucho más equilibrados y constructivos.¿Te gustaría que lo contrastáramos con datos reales o que hagamos una revisión punto por punto del texto para desmontar o matizar sus ideas?
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Pues no lo vemos porque lo hacemos todos los días, pero los padres son HÉROES.
Levantar una familia y darle todo lo que se puede necesita mucho esfuerzo, mucho tiempo y mucho dinero. Durante AÑOS.
Y se hace de modo altruista, porque salvo amor, poco se saca.
Sin embargo todos los padres son todos necesarios; lo que pasa es que solo te das cuenta cuando faltan.
Una familia sana necesita de un padre y de una madre, como siempre y en todas partes se reconoce.
Es solo ahora, con la religión laica del marxismo cultural cuando, para destruir la familia para poder imponer el marxismo de siempre, se demoniza al hombre, se demoniza al padre y se demoniza a la familia.
Para someternos no nos quieren libres. Nos quieren pobres, con problemas, sin trabajo, sin casa…
Ser agradecido no solo es ser buen nacido: Salva vidas.
Las nuestras.
¡Bravo por esta organización que lo reconoce y lo publicita!
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