Nada más independizarse de España: Zoológicos humanos, la vergonzosa  “exportación” chilena 


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La independencia de Chile, tras las guerras civiles de los realistas y los independentistas apoyados por la masonería inglesa y francesa, es reconocida por España en 1844. Desde ese momento la población indígena dejaba de estar bajo al protección de los reyes de España. Pocos años después los indios comienzan a ser vendidos y exportados para mostrarlos en zoos vivientes.

Sus vecinos indígenas del lado argentino tendrán menor suerte, se produce un exterminio de ellos sin que nadie se oponga a que los ganaderos argentinos paguen unos pocos chelines por cada cabeza de indio, promoviendo una de las mayores masacres de la historia americana.

En definitiva las poblaciones de origen indígena quedaron desamparadas tras la marcha del poder real español de America. Solo les quedaron algunos religiosos que se jugaban literalmente la vida para defenderles, sin poder apoyarse en las viejas leyes españolas que protegían a los indios de la esclavitud  y las injusticias desde Isabel la Católica.

La Vergonzosa “Exportación” Chilena

Con la venia del Estado chileno, en 1889, once selk’nam -entre ellos un niño de 8 años- fueron llevados a Europa para ser exhibidos y tratados como animales. Los indígenas patagónicos eran una rareza. Así los trataron. Así murieron.

El empresario Maurice Maitre junto a un grupo de selk’nam en la Exposición Universal de París del año 1889.

A veces les prometían aventuras, y otras, simplemente, se los llevaban sin prometer demasiado. Desde las frías costas magallánicas, los galeones zarparon a principios del siglo XIX rumbo al Viejo Mundo, con una carga bastante codiciada: decenas de aborígenes para exhibir en parques, ferias y museos. En nombre de la ciencia y del progreso, los envíos contaban con la autorización del Estado de Chile.

Esa fue la suerte que corrieron, entre 1878 y 1900, tres grupos de nativos pertenecientes a las etnias Tehuelche, Kawésqar y Selk’nam. Fotografiados, medidos y obligados a actuar en público, muchos de ellos no lograron volver a la tierra de la que fueron arrancados.

Víctimas del Imaginario

Su idea fue potenciar el fenómeno del zoológico, una mina de oro a fines del siglo XVIII. Patentando su invento como “Zoológicos Humanos”, el empresario alemán Carl Hagenbeck aprovechó sus contactos con el mundo científico y se dedicó a reclutar aborígenes.

Entre ellos, un grupo de Tehuelches. Capturado en 1879, el grupo patagón fue el primero en llegar a Europa. Interesados por los comentarios de Darwin, quienen la década del 30 describió a los fueguinos como seres “abyectos y miserables”, los científicos no escondieron su interés por averiguar si eran o no el eslabón perdido entre el ser humano y el simio.

Sólo debían actuar de “ellos mismos”. Pero de acuerdo al imaginario de lo salvaje,todos los aborígenes chilenos fueron provistos de arcos, flechas, pipas y plumas. El público, que pagaba para verlos cantar, tocar instrumentos o hacer rituales, también les arrojaría carne cruda, creyendo que se trataba de caníbales. Producto del sarampión o de la viruela, muchos murieron en el camino.

Las fuentes también constatan el abuso de varias mujeres por parte de los guardias, de quienes contrajeron enfermedades venéreas. Luego de ser exhibidos en jaulas en Hamburgo, Berlín y Dresde, el grupo de tehuelches retornó tres meses después a tierra chilena.

Los que siguieron, sin embargo, no tuvieron la misma suerte. Con ocasión de los 100 años de la “igualdad, libertad y fraternidad”, la Exposición Universal de París (1889) tuvo entre sus atracciones una flamante Torre Eiffel y una “Aldea Negra”, compuesta por 400 nativos.

Unos selk’nam fueron capturados por el ballenero belga Maurice Maître para participar en la muestra, pero sólo nueve sobrevivieron la travesía. Una mujer embarazada y un niño llamado Calafate figuran entre los secuestrados.

“Todo indica que Calafate se quedó por su propia voluntad”. Tras ser expuestos en París y luego en el Royal Aquarium de Londres, los selk’nams fueron llevados al Museo de Cera de Bélgica. Mientras, una entidad cristiana pondría la voz de alerta, provocando un conflicto entre diplomáticos y asociaciones humanitarias que les granjearía el pasaje de regreso. Bajo el cuidado de un chileno que viajó como guardia desde Tierra del Fuego, Calafate se quedó en Europa durante un año.

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Mision cientifica francesa al Cabo de Hornos, 1882 – 1883

Los archivos salesianos de Roma revelaron a los investigadores el paradero de Calafate: acompañado de un sacerdote, regresó a Punta Arenas. Otro artículo, publicado en el diario El Magallanes, también se referirá al menor, aunque sin aludir a su paso por los zoológicos humanos.

En el año 2002, el historiador chileno Christian Báez junto a su colega inglés Peter Mason encontró una serie de fotografías de indígenas del extremo sur de América exhibidos en Paris y otras capitales de Europa en los llamados “Zoológicos Humanos” en la década de 1880;  cuatro años después publicaron el libro “Zoológicos Humanos.

Fotografías de fueguinos y mapuche en el Jardín d’Acclimatation de París, siglo XIX”, (Editorial Pehuén, Santiago) con medio centenar de imágenes producto de dicha investigación.

Decidieron posteriormente construir un material fílmico denominado Calafate.  Esto en razón del nombre de un niño selk’nam de ocho años, encontrado en suelo europeo, al igual que el hallazgo de las osamentas de cinco Kawésqar, en el departamento de antropología de la Universidad de Zürich, Suiza y gracias a esta extensa investigación, se pudo repatriar las osamentas de los  kawésqar encontrados.

El Tardío Regreso

Las osamentas de Hendrich, Lise, Capitano, su esposa Piskouna y su hijo Greth -según los nombres dados por sus captores a los aborígenes- fueron trasladados hasta Punta Arenas, donde se realizó un acto de reparación histórica. El miércoles 13 de Enero de 2010 fueron llevados hasta la isla Karukinká en Tierra del Fuego (más de 100 kilómetros al sur de Punta Arenas), donde se realizará una íntima ceremonia fúnebre en que los miembros de la comunidad kawésqar los dejarán en canastos de junco dentro de cuevas, como manda su tradición.

Fuente: Sociapiens.



Categorías:HISPANIDAD

7 respuestas

  1. Los que pagaban por «el par de orejas» eran los ingleses dueños de la mayor parte de la Patagonia Argentina. Trajeron hasta bandidos yanquis para hacerlo.

    Luego el francés que se autonombro el Rey de la Patagonia sometía a los pueblos chon (sherk’man, Aöniken, etc), y y asesinaban a los que se oponian.

    Argentina no realizó ningún exterminio de aborígenes, y solo se realizó la expedición para expulsar y terminar con los invasores ladrones, secuestradores y asesinos araucanos (hasta los gününa yajisk -pampas-se unieron junto a los demás chon a las fuerzas del Gral Roca contra Namuncurá). Todos los datos con fechas y nombres están registrados.

    El corsario argentino Luis Piedrabuena, le otorgó el nombramiento como primer Gobernador del Territorio de Santa Cruz al cacique Aöniken Casimiro.

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  2. Avatar de Raquel Casviner Cañellas

    Muy interesante. Hay que dar a conocer, que los españoles no fueron tan malos. Que gracias a los Reyes católicos se fundaron Universidades y Hospitales. Y a los indios, siempre se les trató como personas

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  3. Avatar de ENRIQUE LOPEZ BERMEJO

    MUY INTERESANTE RECORDATORIO HISTORICO
    Como curiosidad indicaros que en dichos «jardines zoologicos» se ponian carteles indicando que «NO había que tirarles comida pues ya eran alimentados por la organización».
    A este paso los que acabaremos en «zoologicos INhumanos» seremos los blancos que sobrevivan a la INVASION.

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  4. Muchas gracias Somatemps, por vuestra constancia y por todas vuestras aportaciones tan valiosas, por divulgar tantas cosas desconocidas para la mayoría.

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  5. Avatar de Cristina Martin Ortega

    Gracias. No sabía este otro caso de barbarie cometida por los civilizados europeos que critican «el genocidio español» en América.

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    • Avatar de Oscar Rubén Espinosa

      Lo q más me duele de todo esto, es la Religìon Católica principalmente.Que siempre estubieron y estarán al tanto de esta atrocidades, La guerra al Desierto, y otras tantas.La religión invocandose a Dios y sus penurias.El hombre como ser ,somos indiscriptible, no sabemos como vamos actuar en la vida, de allí estas atrocidades.Solo creo en Dios, y su perdón x los pecados del Mundo, q asi sea.

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  6. El típico humanismo masónico.

    No es de extrañar: para los que la cumbre de la civilización son las reuniones de los ilustrados franceses en las elegantes moradas de las salonnières, todo lo que no entre en ese ideal es barbarie, especialmente si la Iglesia Católica está por medio.

    En cuanto a la explotación del ser humano, después de «liberar» al empresario de las trabas religiosas y consuetudinarias que protegían al trabajador, pues ahora les toca la explotación del indio, porque la riqueza hay que moverla, no puede quedar parada o en manos muertas.

    (y que mejor modo que poner esas extensiones de tierras indígenas en explotación, a cambio del exterminio de sus legítimos propietarios, aunque su propiedad haya sido confirmada por el Rey Católico de España -que ahora, gracias a los liberadores masones ingleses y franceses, es un extranjero- y desde luego no un ilustrado)

    Parece la civilización al revés.

    No es de extrañar que después de las revoluciones liberales masónicas vengan las comunstas (Trostky era, además de comunista judío, masón)

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