Increíble pero cierto. Los grandes defensores del feminismo y contra la manipulación de la imagen objeto, los polemistas, han propuesto su icono de la República.
Lo malo es que es una flagrante copia de un salón de belleza. Ello demuestra o que están faltos de imaginación, o que su diseñador es un jeta o que son unos cures integrales. Cualquiera de las respuestas es válida.
Ja ja… Pero qué indigentes intelectuales… O sea, qué gilipollas (por si no lo entienden).
Gentuza. Basura con aspecto de ladilla.
Pero a qué república se refieren estos? A la venezolana?
Jaja, en el argot del diseño gráfico a ese se le llama un fusilador. Y además un desviado, si el logotipo está bien para un salón de belleza, para una República es melifluo y afeminado.