El escalofrío recorre por los dirigentes del PP barcelonés. Lo causan los sondeos que los sitúan prácticamente al borde de la extinción respecto a la representación en el Ayuntamiento de Barcelona. La única solución que ven factible para salvar asiento y sueldo es integrarse en la lista de Valls. Y así lo han hecho saber a la dirección de Madrid.

De momento Madrid  insiste en que ni hablar del peluquín; que el PP debe estar presente en los ayuntamientos de toda España y especialmente en la segunda ciudad más importante de España.

Pero aquí no lo ven tan claro y hasta el último momento no sabremos qué pasará con la candidatura del PP para el Ayuntamiento de Barcelona. Visto desde fuera da igual. De momento todos los sondeos indican que la candidatura Valls no ha provocado un revulsivo ni siquiera en los sondeos. Vayan los «constitucionalistas» juntos o separados los números no salen.

De momento Valls se lo tendría que estar currando más, en vez de dedicarse a las páginas rosas con la Gallardo y su pastizal de dinero.

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