El magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha ordenado reactivar las órdenes internacionales y europeas de detención contra el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, los cuatro exconsellers huidos junto a él -Clara Ponsatí, Meritxell Serret, Lluis Puig y Antoni Comin-. Además, ha activado la misma orden para la número dos de ERC, Marta Rovira, quien esta misma mañana anunciaba que se iba al “exilio” y evitaba presentarse a la citación judicial.
Fuentes jurídicas sostienen que el juez no ha incluido en las órdenes a la exportavoz de la CUP, Anna Gabriel, contra quien pesa únicamente un delito de desobediencia que lleva aparejada una mera inhabilitación, aunque sí se le mantiene la orden nacional de detención. El expresidente y tres de los consellers se encuentran actualmente en Bélgica; la cuarta, Ponsatí, se ha trasladado a Gran Bretaña, mientras que se ha anunciado que Rovira ha optado por Suiza.
Me parece estupendo que el Magistrado haya reactivado la orden internacional de detención
de los delincuentes fugados, huidos, escapados, del Magistrado para cumplir con las leyes que rigen en España, Patria de todos los españoles, catalanes, vascongados, navarros, balearianos, valencianos y demás autonomías,regiones o nacionalidades de toda España.
Ya era hora que se acabase el cachondeo. Basta de reírse de la justicia