Los peajes de las autopistas que hay en Cataluña que dependen del Estado, rebajarán el precio una media de un 0,4%, siendo este el segundo año consecutivo que bajan los precios. Las autopistas que dependen del estado tendrán la siguiente rebaja, la AP-7 entre Barcelona y la Jonquera será rebajada un 0,47% y la AP-2 entre Tarragona y Zaragoza será reducida un 0,47%. Sin embargo la Generalitad ha decidido, a través del Departamento de Territorio y Sostenibilidad, que este año 2017 las autopistas que son exclusivamente de su titularidad, subirán un 0,70% respecto al año pasado
Estamos hartos de oír insultos y falacias hacia el resto de España, tales como los andaluces y castellanos tienen todas las autovías gratis, por supuesto, pagadas «per nosaltres» cuando salta esta perla de noticia. La Generalitad, no sólo no rescata sus peajes, si no que los aumenta de precio.
Se aprecia un audaz ejercicio de ecuanimidad y también de solemne ignorancia, dado que todas las autovías «andaluzas y castellanas», fueron financiadas por fondos europeos y con la obligación de que se construyesen en las zonas con menor renta, para, de esta manera, igualar todo el territorio.
Se constata una brillante gestión económica, cuyo único fin es recaudar, mientras en los bolsillos de los catalanes empiezan a aparecer preocupantes telarañas.
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El fin no es solo recaudar; sino que los amigos, que son los que tienen la concesión de la explotación, sigan montados en el dólar.
De ahí el interés de todos los pujoles, cuando estaba Aznar en la Moncloa, de que las concesiones franquistas, que estaban a punto de caducar, fuesen renovadas (al excusa era que así los amigos de Pujol seguirían pagando el IVA al Estado) (recuerdo que la construcción está hecha; su financiación está ya amortizada; y el uso seguro y frecuente: por tanto el negocio es redondo)
Son los mismos independentistas de las concesiones los que atizan el descontento; mientras que al mismo tiempo impiden que las autopistas, su gran negocio, bajen de precio para los usuarios o vuelvan al Estado -como desde el principio se estableció a cambio de la concesión.
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