Pepe Luis Trapero, de nibilísimo apellido catalán, jefe de Mossos y personaje discutido y discutible por montones de sospechas que en otro momento contaremos, está creando una escisión en el cuerpo policial de los Mossos.

Un centenar de Mossos d’Esquadra de paisano le abuchearon la pasada noche en la cena navideña. Los agentes iban vestidos con sombreros de Papá Noel, narices de payaso e instrumentos para hacer ruido. «Ponte el uniforme y sal a patrullar» o «boti, boti, boti, Trapero qui no boti», coreaban todos a una.

Ya son muchos desplantes de Trapero, el hombre que sirve a los políticos y no a la sociedad.La gota que ha hecho colmar el vaso ha sido la puesta en libertad de un detenido después de haber atropellado a un mosso, que está en coma inducido, en Rubí.

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