Todos vestidos de negro como buenos enterradores subvencionados

Jordi Borràs, «periodista-humanista-pacifista» y también cuentista a ratos libres, no tuvo escrúpulos de compartir mesa y risas con el asesino Carles Sastre en el acto de presentación de SOM AUTÒNOMS de la Intersindical-SCS. Dicho colectivo pretende agrupar a trabajadores autónomos «independentistas y de clase» en una economía lastrada por la bancarrota de la Generalitat y deslocalización y cierre de empresas cada día vez más evidente. Carles Sastres -conocido como el «Chacal de Hospitalet»-es para mayor perversión, Secretario General del mini-sindicato micronacionalista, con un sueldo cercano a los 50.000 euros anuales por calentar silla allí donde los diseñadores del Procés separatista lo invitan. ¡Hasta en TV3!

https://somatemps.me/2015/12/18/tv3-presenta-a-un-ex-miembro-de-terra-lliure-como-a-un-heroe/

El independentista Carles Sastre, condenado a 30 años por el atentado contra Bultó

El independentista catalán Carles Sastre Benlliure, de 30 años, ha sido condenado por la Audiencia Nacional a 30 años de reclusión, como autor del asesinato del industrial catalán José María Bultó, que falleció en mayo de 1977 en su domicilio de Barcelona después de que varios miembros del denominado Ejército Popular Catalán le colocaran un artefacto explosivo adosado a su pecho.

Montserrat Tarragó, de 31 años, juzgada junto a Sastre por el mismo delito, ha sido condenada a cuatro años de prisión por colaboración con banda armada. Sastre ha sido condenado también al pago de 10 millones de pesetas a los herederos de Bultó, solidariamente con los otros ya condenados en su día por el asesinato: Francesc Xavier Barberá Chamarro y Antonino Messegué Mas.La sentencia declara que el 9 de mayo de 1977 Sastre, Barberá y Messegué, miembros del Ejército Popular Catalán, irrumpieron, en unión de otras dos personas, en el piso propiedad de Cristóbal Font, cuñado de Bultó. A continuación colocaron el artefacto en el pecho del industrial y le advirtieron que si intentaba despegarlo sin que hubiera sido desactivado haría explosión.

Antes de irse le exigieron como condición para retirar la bomba el pago de 500 millones. Seguidamente, abandonaron el piso. Bultó regresó a su domicilio, y cuando se encontraba en el cuarto de baño se produjo la explosión del artefacto.

http://elpais.com/diario/1985/10/31/sociedad/499561207_850215.html

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