Placa conmemorativa

Los Jocs Florals  son una serie de certámenes literarios que tienen lugar durante la primavera en numerosas ciudades, especialmente en las de habla catalana. Tienen su origen en Toulouse, en donde fueron creados en 1323 para difundir y proteger la lírica trovadora. Barcelona vivió sus primeras ediciones a finales del siglo XV, pero no fue hasta 1859 que empezaron a tener continuidad y prestigio gracias a la capitalidad cultural de la ciudad.

En 1956 y bajo el auspicio de concejal de distrito Narcís de Carreras (futuro presidente del Barça y de La Caixa) se pudieron celebrar unos nuevos Jocs Florals en Barcelona, concretamente en el barrio de la Ribera. La iniciativa se englobó dentro de las fiestas populares de la plaza de la Lana que cada año organizaba la asociación de vecinos de esta pintoresca zona del Born.

En mayo de 1967 se instaló en el lugar una placa escultórica para recordar aquella cita que supuso una apertura para la cultura catalana bajo el franquismo. El autor de la placa fue el famoso artista Frederic Marés, uno de los participantes en el jurado de aquel primer evento. La placa en la que se lee en catalán “LOS JUEGOS FLORALES TUVIERON RENOVADA EXPRESION EN ESTA PLAZA DE LA LANA DESDE EL AÑO 1956 – MAYO DE 1967″ muestra a una mujer trabajando artesanalmente con lana, en un claro guiño al nombre de la plaza que hace referencia al mercado público que en este lugar había desde finales del siglo XV.

Plaza de la Lana

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