Canal Fortunata y Jacinta
Entrevista con Josep Alsina Calvé
«Del Mayo del 68 a la “revolución de las élites” del siglo XXI». Con la perspectiva de más de medio siglo podemos observar fenómenos curiosos, como el hecho de que algunas de las famosas consignas que adornaban las revueltas estudiantiles sean actualmente utilizadas en publicidad, tales como «Prohibido prohibir», «Seamos realistas, pidamos lo imposible», «La imaginación al poder», etc. Todo ello y más, con José Alsina Calvés.
Categorías:CULTURA, ENTREVISTAS, GLOBALIZACIÓN, TRIBUNA
somatemps.me 
https://www.youtube.com/watch?v=K9gMcDUuvCc
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Muchísimas gracias, Somatemps. Yo soy un fiel seguidor de «Fortunata y Jacinta» desde hace muchísimo tiempo.
El Ministerio de Desigualdad es un chiringuito para robar a manos llenas. Poco a poco, los maltratadores alcohólicos, con la camisa desabrochada y con más pelo en el pecho que un conejo de Angora, han ido disminuyendo. Lo típico: el gazpacho andaluz, el cigarrillo de tabaco negro, la copita de coñac, la cinta de casete de Juanito Valderrama y el cinturón del pantalón para dar una paliza a la esposa. El típico hombre maltratador español que cada noche llegaba borracho a casa, tras pasarse todo el día en el bar «Manolo y Pepe» y arrasar con toda la producción de bebidas alcohólicas de la España franquista.
Con la llegada del nuevo milenio y del nuevo siglo XXI, las Charos feminazis tuvieron una gran idea: «vamos a importar una gran cantidad de personas sin civilizar, de culturas salvajes, en cuyos países (islámicos, se entiende) las mujeres son tratadas peor que una tonelada de estiércol caducado y valen menos que un saco de patatas podridas.» De esta manera, se mantiene vivo el relato de «todos los hombres son unos machirulos opresores».
Eso sí, las manzanas, las peras y las naranjas no son de España, sino de Papúa Nueva Guinea. Pero no, los aviones no contaminan. ¡No qué va! Y al pobre ciudadano que no puede comprarse un vehículo nuevo (eléctrico, claro), lo machacan prohibiéndole conducir un SEAT 1500 Fúnebre o un Simca 1000.
Para demostrar que sí existe el «cambio cambiático», abrieron las compuertas de las presas y acabaron con la vida de casi todos los valencianos. Nos ocultan el número real de muertos. No hubo ninguna DANA. «¿Veis cómo sí existe el cambio climático?» (dicen los del Gobierno, mientras se ríen a escondidas).
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