En la parte final del programa de este 27 de diciembre, Joel Díaz pidió ayuda a una colaboradora, Miriam Martínez, para que corrigiera sus errores al hablar en catalán. Martínez es la responsable de asesoramiento lingüístico de Optimot, un organismo del gobierno de la Generalitat. El presentador le comentó, compungido, que “me paso toda la vida reivindicando el catalanismo y cagándome en España y tal, y luego digo bueno, vale…”. La lingüista le restó importancia a esas expresiones incorrectas, sobre todo porque Díaz las hace en un late night. Cagarse en España en Zona Franca también debe estar justificado por ese mismo motivo.

El programa Zona Franca de TV3 ha emitido 40 capítulos desde su estreno como late night show el 18 de octubre. El día del estreno, el presentador, Joel Díaz, entró en el plató gritando «puta nit i bona Espanya«. Luego dijo que se había equivocado porque tendría que haberlo dicho al revés pero que los nervios del primer día le habíamos traicionado. Sin embargo, en los 39 programas siguientes ha empezado siempre con el mismo grito, convenientemente aclamado por el público azuzado por el regidor del plató. Las quejas de muchos catalanes y de grupos de la oposición en el Parlament no han servido para que dejara de lanzar ese exabrupto en cada programa. Por el contrario, los insultos y vejaciones a España y sus símbolos ha sido constante. El pasado día 27, Díaz lo rubricó con una confesión: “Me paso la vida cagándome en España”.

El último programa de 2022 de Zona Franca, emitido el jueves 29 de diciembre, se cerró con una representación de Els Pastorets. En medio de su diálogo apareció un demonio que les dijo en castellano: “Buenas tardes, amables caballeros, ¿podrían decirme que hacen ustedes alterando el orden público?”. El demonio castellanohablante se refirió a los dos pastorcillos como catalufos y exigió que disolvieran su reunión. Ellos se quedaron pensativos, Minovas preguntó “¿Nos vamos de España?” y Díaz contestó: “Vayámonos”. Volverán hoy con la entrada triunfal del presentador gritando «puta nit i bona Espanya» y los aplausos entusiastas del público.

Pues sí, desgraciados, a ver si os váis de España. Esperamos que en Andorra os acojan en su magnífica televisión.

Categorías:Supremacismo