No podía ser de otro modo. Sant Jordi no tiene futuro. Es macho, muy macho. Heteropatriacal. Eso sí casto, que no es sinónimo de gay. Mata animales en vías de extinción. Es un enemigo de Gaya, la madre tierra.
Y eso había que remediarlo. No podemos adoctrinar a los niños en valores represivo-capitalistas-heteropatriarcales y contaminantes. Por eso, la editorial Galera, este años ha dedicado que San Jorge se convierta en Santa Jordina. La verdad es que no se explica si el cambio es por operación pagada por la seguridad social o bien lo ha patrocinado una ONG.
Tampoco sabemos si al final se establecerá una relación consentida entre adultos (de diferentes especies) y Jordina y el dragón tendrán relaciones creativas, revolucionarias y libres, muy libres. Tampoco sabemos si San Jorge, el carca, el vejestorio, será finalmente juzgado por delitos de odio y ecológicos. Todo es posible. Para conocer la trama debe comprar el libro, cosa que nosotros no pensamos hacer.
Categorías:Corrección política
somatemps.me 
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Decididamente la Iglesia debe recticar todo el santoral
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Y a este paso, San José pasará a ser Santa Pepita, y Santa Ana, Santo Ano… ¡Que Dios nos coja confesados…!
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O sea que ahora hay que feminizar también los santos. Realmente, las Jordinas o Georginas ya celebran su santo por San Jorge. O sea que, mirándolo bien, no habría nada que cambiar, pues cási todos los nombres tienen su femenino.
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Esto no es ni corrección política ni nada, simplemente falta de materia gris en el cerebro y cabezas huecas, donde ya no circula ni el aire.
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