Las iniciativas de algunos de los dirigentes independentistas encarcelados en Lledoners están acabando con la paciencia de la directora del centro, Paula Montero. El hartazgo de la directora de la prisión de Lledoners está llegando al límite e incluso se está planteando la renuncia al cargo.

Hay un elemento que ha acabado de hastiar a la directora y es la huelga de hambre iniciada por Jordi Sànchez y luego secundada por Jordi Turull, Josep Rull y Quim Forn. Todo indica que el que lidera y el «follonero» de Lledoners es Jordi Sánchez, el hombre de confianza de Carles Puigdemont quien trata de poner patas arriba la normalidad del centro penitenciario.

Todo ello, sumado a las continuas visitas de autoridades, desespera a la directora de Lledoners, ya que la excepcionalidad de los políticos encarcelados continúa abriéndose paso y se salta el reglamento penitenciario. Las visitas de autoridades son continuas. El pasado fin de semana, sin ir más lejos, acudió a Lledoners el presidente de la Generalitat, Quim Torra. Todo ello ha alterado notablemente el orden en la prisión.

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