Los abogados de Carles Puigdemont le han echado una jarro de agua fría a sus planes de asistir el 4 de septiembre a un acto en la localidad francesa de Perpignan, a apenas 40 kilómetros de la frontera con España. Lo abogados tienen miedo de la posibilidad de que sea detenido.
El coordinador de la estrategia internacional de su defensa, Gonzalo Boye ha comunicado que, tras la retirada de la euroorden dictada contra Puigdemont puede viajar libremente, aunque Llarena podría volver a dictar una nueva euroorden en cuanto el expresidente pisara otro país.
Además el abogado ha apuntado otra razón: la existencia de un convenio de «persecución en caliente» entre España y Francia que autoriza a la policía española a entrar y actuar en territorio francés en busca de un fugitivo y a la francesa a hacerlo por debajo de los Pirineos.
En conclusión: parece que Puigdemont se ha ido por la pata abajo.
Categorías:POLÍTICA
somatemps.me 
Realmente Puigdemont no puede ir donde quiera. En cuanto salga de Bélgica corre el riesgo de que se active una Euroorden, cosa que se puede hacer en segundos.
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Ay Puchi, Puchi,cada día me defraudas más.
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Puede ir a pisar el Alguer, que ahi hablan algo parecido al catalan donde a los indepes les pone tontorron el recordar su imperialismo medieval.
O si no puede ir al ducado de Atenas, donde guardan un buen recuerdo de los catalanes y su aficion a agujerear la epidermis ajena.
O puede ir a O Catalâo, en Brasil, donde los mas pajilleros mentales indepes sospechan ( como no!) que el nombre viene de unos aventureros catalanes que fueron a Brasil a hacer intercambios culturales con las indigenas de la zona.
O puede esperar a que se seque el mar del norte y aparezcan nuevas tierras donde los catalanes «que se quieren ir» se asienten definitivamente
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