El 16 de marzo del año 1521, los españoles de la expedición de Magallanes llegaron a Cebú. No es sorprendente que el rajá Humabon y su esposa Humamay, que eran los caciques de la ciudad, le dieran la bienvenida sonrientes, ya que eran los primeros occidentales que ponían pie en aquellas tierras.

Magallanes plantó una gran cruz en la ciudad y pidió bautizar a los nativos en la fe católica. En marzo de 1565 Miguel López de Legazpi desembarca en la isla de Cebú con 380 hombres. El 27 de abril de 1565 funda la Villa de San Miguel (actual Cebú), cabecera de los dominios españoles en Filipinas hasta 1571, y base para la conquista del archipiélago filipino. Han transcurrido cerca de quinientos años desde la llegada de los españoles, y la cruz erigida por Magallanes continúa alzada en el centro de la ciudad, símbolo de la cristiandad, el legado—no el único—más fuerte dejado por ellos.

También se sigue venerando el Niño Jesús o Santo Niño de Cebú que le regalaron los primeros españoles a la esposa del rajá de Cebú. La figura del Santo Niño (circa 500 años) se puede encontrar actualmente en la Basílica del Santo Niño.

La ascendencia española sigue siendo agradecida por los vecinos en sus fiestas patronales, como se puede ver por las fotos.

Categorías:HISPANIDAD