Jordi Perelló, mecánico propietario del taller ‘Perelló Motors’, podría tener un futuro bastante complicado. Es el independentista que se negó a arreglar un vehículo de una agente de la Policía Nacional por el simple hecho de pertenecer al cuerpo policial del Estado.

Esta decisión le ha valido ser denunciado por un posible delito de odio, ya que el mecánico se negó a arreglar su coche por “convicciones personales”. Pero con lo que no contaba es que «por convicciones personales», muchos han planteado boicotear su taller de Reus.

A través de Google, numerosos ciudadanos han escrito reseñas negativas que están perjudicando la imagen del negocio en Internet. A este ritmo, va a perder muchos clientes. De hecho, fuentes cercanas a los Mossos d’Esquadra de Reus, han confirmado que muchos de los vehículos de los agentes de comisaría de Tarragona y Reus eran arreglados ahí e incluso recibía encargos oficiales que dejarán de producirse.

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