El popular Tramvia Blau de Barcelona dejará de funcionar, de manera indefinida, el próximo día 1 de febrero. La falta de mantenimiento tanto de la infraestructura como de los vehículos ha obligado al Ayuntamiento a tomar una decisión tan drástica, que priva a los ciudadanos de llegar al pie de funicular del Tibidabo con el histórico tranvía

De hecho, la responsabilidad del funcionamiento del Tramvia Blau corresponde a Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que según se desprende de esta decisión, no ha invertido el dinero suficiente para mantener en perfectas condiciones uno de los sistemas de transporte púbicos más antiguos que perduran en la ciudad.

Al parecer, el Tramvia Blau necesita no únicamente un lavado de cara, sino una profunda renovación, lo que implica una millonaria inversión. Los técnicos consideran que las obras que deben llevarse a cabo para que un medio de transporte como este, usado sobre todo por turistas, son tan necesarias como importantes.

Colau ya no nos deja ni los recuerdos de la infancia.

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