Margarita de Dinamarca, el placer de decir lo que se piensa.



La reina Margarita de Dinamarca, se ha pegado el gustazo de decir lo que piensa, para algo es la máxima autoridad en Dinamarca. La mitad de europeos piensan lo que ella, pero claro, la corrección política es un tirano demasiado temible aún.

La Reina, ofrece su dura opinión sobre la inmigración musulmana en un libro titulado: De dybbeste rødder (Las raíces más profundas), un libro recién publicado en el que, en conversaciones con el periodista Thomas Larsen, repasa la historia de Dinamarca desde los tiempos de los vikingos. Sin embargo, uno de los temas cúlmenes del texto son las referencias de la monarca respecto a la inmigración musulmana.

Se puede leer en el libro: «En general, los daneses hemos subestimado el desafío que supone conseguir que la integración tenga éxito», afirma. «Como, por ejemplo, al no dejar claras en su momento las reglas de juego de la democracia danesa a los grupos islámicos que estaban dispuestos a desafiarlas. Creíamos que ese tipo de cosas desaparecerían por sí mismas. Que cualquiera se convertiría en danés en poco tiempo. Para nosotros estaba todo tan claro que pensábamos que sería igual para quienes se establecían en nuestro país. Pero hemos aprendido que no es así». Y sigue: «Resulta difícil cuando vienen tantas personas en tan poco tiempo».

Esta preocupación tiene su lógica basada simplemente en estadísticas.. Sólo hay que repasar las estadísticas para comprobar que su integración plantea grandes dificultades. Están claramente sobrerrepresentados en los índices de criminalidad y desempleo; Dinamarca es el segundo país europeo, tras Bélgica, con mayor proporción de combatientes yihadistas en Siria; y, desde 2006, la Policía ha frustrado casi una decena de atentados islamistas en suelo danés. Todos salvo el que acabó con la vida de dos personas en Copenhague en enero de 2015.

En menos de un año, la reina ha cambiado radicalmente su opinión sobre la inmigración y ha reconocido tener una visión ingenua hasta hace poco.



Categorías:ISLAMIZACIÓN

5 respuestas

  1. La corrección política no existe.

    Quiero decir, es una censura, pero con otro nombre, impuesta por los «progresistas» y las logias que les manipulan para dominar a la población creando una inquisición manejada por el individuo que decide lo que es progresista y lo que no:

    Así, la inmigración masiva, la predicación a los niños en las escuelas sobre el holocausto, el laicismo…es ‘progresista».

    El sentido común, el respetar la ley votada en el parlamento por los representantes de la nación, el no tirar el dinero de los impuestos…eso es «fascista» y «antisemita».

    Parece ser que somos la generación más preparada de la Historia…

    (eso dice la propaganda progresista)

    Pero vistos los resultados y de como nos manipulan en su beneficio….

    …Será la carne de pollo, que tiene hormonas, como diría Chavez en otro contexto.

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    • ¿Ese individuo es Soros?

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    • Tal cual. Lo denominado «políticamente correcto» es, simplemente, una autocensura para estar a tono con la opinión mayoritaria, y ésta no lo es numéricamente, sino por la fuerza del poder económico de un determinado grupo social que controla TODO, habiendo llegado ya casi al éxito total al haber impuesto a las Corporaciones por encima de los Estados…, controlan los medios de comunicación (Reuters y más), y ahora también pretenden controlar nuestras conciencias, con leyes como la LGTB, con la cual llevan una campaña intensa… y lo que hemos visto en las elecciones yankees ha sido pasmoso…, prácticamente todos los medios han hecho seguidismo de los intereses de este grupo, pintando a Trump como un horror, cuando sólo es un bocazas… en el tema del machismo del que le acusan, ningún medio se ha acordado del episodio de Bill Clinton con Mónica Lewinsky, que fue una tontería comparado con otros callados, pues Clinton es un genuino depredador sexual y acumula historias bien oscuras… y no pasa nada… pero ya va habiendo una creciente rebeldía, que irá a más, y tiene que ir a más para frenar ese proyecto totalitario globalizador y homogeneizador del ser humano para un mejor control (por ellos), para volver la vista al concepto Nación, huyendo de ese estigma que estos perversos le ponen cuando convierten Nacionalismo en NaZionalismo, cuando los nuevos nazis son ellos. Y son ellos, la mafia jázara, la promotora de conflictos como la secesión de Cataluña…

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  2. Si quieren ayudar a los musulmanes, que envíen soldados a sus países a proteger a la población y a poner orden, y que no tengan que huir a países con cultura y vida totalmente diferente de la ansiada por ellos.

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    • Los hechos son evidentes: lo que está pasando ahora mismo en Siria es un castigo a Bashar al-Ásad (a ver si le echan y ponen a alguien más obediente a Jerusalén), y una oportunidad para que la población salga en masa del país.

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