El refugiado sirio Osama, que se hizo famoso tras la zancadilla que recibió de una periodista húngara, llegó hace un año a Madrid (bajo sospecha de ser terrorista) por una oferta de trabajo del club de entrenadores Cenafe. Pasados los 12 meses de duración de su contrato, el club no le ha renovado. Su llegada generó una polémica pues había sido reconocido como un represor de kurdos.
Al parecer, la decisión de Cenafe de no renovarle trabajo se debe a que Osama no ha aprendido español, cosa que habían acordado ambas partes. Además de su sueldo, recibía una ayuda para el alojamiento y cobertura sanitaria para sus dos hijos, que residen con él en la localidad madrileña.
Osama busca ahora un empleo y dice estar atravesando una situación complicada. También ha dicho que el club podría haberle utilizado tras la mediatización de su caso, provocado por la patada de la periodista húngara, que se hizo viral.
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somatemps.me 
matemática prueba la inocencia de la camarógrafa. La zancadilla fue una mentira. Youtube: «Camerawoman, Petra László vs math illiterate»
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Que se vuelva a su país, en España no hay sitio para esta clase de gente, ni en el resto de Europa, por supuesto.
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Me parece muy mal que se utilice a estas personas con objetivos políticos.
Estas personas solo quieren vivir mejor, como todos nosotros; y como todos nosotros van a donde le dan casa y ayudas sociales.
Solo está exigiendo lo que se le ha prometido.
De buena fe se ha marchado de su país con su familia; y ahora ?qué pasa?
La moraleja , a parte de que no puedes fiarte de los progresistas, es que como en el país de uno, no se está mejor.
Y que , a parte de paz, lo que hace falta en Siria son fábricas que den trabajo.
La lección es obvia para todos nosotros: querer ser como sirios, como intentan desde hace 40 años Jordi Pujol y sus ingenieros sociales, significa sufrir lo que esta pobre gente está sufriendo .
No veo que la solución sea emigrar a Madrid, a ver si un club de fútbol te contrata a cambio de que aprendas español.
Ni ir en manada a invadir Alemania -demasiado tarde: ya está invadida-. Y en todo caso, para los alemanes seguimos siendo católicos, no musulmanes, por lo que , aunque hagamos la Shahada, tendríamos de todos modos las puertas cerradas.
Pero el caso es que estas historias para no dormir ya las vivimos en los años 30. Parece que no hemos querido aprender la lección.
Solo que ahora utilizamos charnegos renegados y moros del ISIs !subvencionados por nosotros!
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Esas personas nunca debieron de ser acogidas. España no está preparada, ni Occidente en general para aceptar a ¨ refugiados de guerra ¨, sobretodo cuando no son aceptados en los países ricos de su entorno cultural y religioso.
Creo haber leído que cobraba 2.500 €/mes, casa gratis y gastos pagados. Luego ha denunciado a su empleador, parece ser.
Yo, personalmente, los expulsaba —progresivamente — a todas esas personas, y a otros millones más de extranjeros que no aportan nada a España y están ¨ chupando ¨ de las ayudas sociales ; recursos que proceden de los impuestos de los ¨ españolitos ¨ al fin y al cabo.
La cantidad de puestos de trabajo y ayudas socioeconómicas que recibirían nuestros jóvenes y personas con edad ya avanzada sin recursos sería descomunal. Pero lamentablemente La Masonería ha querido llevarnos a la Guerra Civil en Occidente ; que está a la vuelta de la esquina ( aunque ya estamos en situación pre-bélica, desde el 2015 ).
No olvidemos que por culpa de ese sujeto ¨ refugiado ¨ una compatriota occidental ha sido objeto de persecución por un sector ignorante de la sociedad y por la presión de La Masonería Internacional, en concreto una periodista ( la de la zancadilla ).
Ni un euro a esa gente, ni ayuda de ningún tipo, y su correspondiente invitación a abandonar ordenadamente el reino de España. Aunque esta es mi opinión, que puede cambiar cuando España posea riqueza verdaderamente se puede incluso aceptar simbólicamente algunos inmigrantes ; pero eso será en períodos posteriores a la G. Civil O., ya comentada.
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Eso es como tantos españoles que luego de la segunda guerra mundial llegaron a mi país, hemos debido cerrarles las puertas según tú? Pues no, gracias a Dios, la gran mayoría de la gente no es como tú, la mayoría de la gente tiene humanidad, qué quizás nos hayamos equivocado con alguno y salió malo, pues igual, no podemos generalizar y juzgar a todos. Cuando alguien necesita ayuda uno trata de colaborar no de cerrar puertas, piensa que puedes ser tu o un ser querido tuyo, nadie está exento.
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