El emirato de Qatar está harto del Barcelona y más en concreto de su presidente Josep María Bartomeu. El contrato de patrocinio con la aerolínea finaliza en el mes de junio y los dueños ya han tomado la decisión de no prorrogarlo, cansados del comportamiento del club azulgrana en las últimas fechas.

El desencanto viene esencialmente por dos motivos:

-Bartomeu ha intentado subir de forma engañosa el precio del patrocinio

-El apoyo del Barcelona a la causa independentista. Piensan que su marca puede quedar señalada y politizada. Qatar no se ha quedado de brazos cruzados y ya han cerrado un acuerdo con el Bayern.

De momento patrocinarán su camiseta de entrenamiento y ya tienen diseñado su desembarco total en el año 2018.

Dada la preocupación en el Barcelona por perder una inversión tan importante para el club, decidieron que el pasado 27 de enero el vicepresidente Manel Arroyo y el directivo Francesco Calvo se desplazaran hasta Doha para intentar reconducir la situación. Sin embargo, tal es el malestar de los jeques que no recibieron a los dos miembros que representaban a la entidad azulgrana.

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