Marcet en un discurso a falangistas catalanes

José María Marcet y Coll pertenecía a una familia monárquica, su padre era miembro de la Unión Patriótica, que apoyó a Primo de Ribera, y él de joven militó en la Juventud Maurista. Tras el Alzamiento consiguió pasar a Francia y de ahí se incorporó al Ejército nacional, alistándose a una Bandera de Falange.

El 27 de enero de 1939 fue el primer nacional en entrar en Sabadell ocupando el Ayuntamiento abandonado y sustituyendo un busto que representaba la República por la bandera española. Marcet fue todo un personaje que ocupó el cargo de alcalde de Sabadell desde 1942 hasta 1960. Compaginó sus responsabilidades de alcalde con sus obligaciones de industrial textil.

Hombre tremendamente práctico, se saltó a la torera aquellas disposiciones gubernamentales que él entendía que entorpecían la recuperación económica tras la guerra. Marcet, sin ser catalanista, se sentía profundamente catalán y se quejaba del poco aprovechamiento del potencial económico de Cataluña.

Sus relaciones con Franco fueron de lo más curiosas y divertidas. Aprovechando que fue el impulsor y presidente del Aero-Club de Sabadell, cuando quería visitar a Franco cogía una avioneta y volaba hasta Madrid y era de los pocos hombres en España que se atrevía a hablarle con claridad a Franco.

De hecho, en 1956, le envió un informe durísimo que nadie en aquella época se hubiera atrevido a escribir. Por una serie de intrigas fue dimitido de la alcaldía tras varias décadas de gestión. El Gobernador civil de Barcelona, Felipe Acebo, se lo comunicó con la excusa de que la “Autoridad” tenía como criterio relevar a las autoridades que llevaban mucho tiempo en el cargo. A lo cual contestó que Franco llevaba más años en el cargo. Moría en 1963. Sus memorias Mi ciudad y yo, son un fantástico relato de la Cataluña franquista.

(De Historias Ocultadas del nacionalismo catalán, Javier Barraycoa, edit. Libroslibres).

Monumento a Marcet

Categorías:CATALANS HISPANS