Tuve ocasión de estar el pasado sábado 12 de Julio  en la localidad de Santa Elena, en el antiguo Santo Reino de Jaén, donde como en otras localidades de la zona (La Carolina, Vilches, etc.) se conmemora cada año el aniversario de la batalla de Las Navas de Tolosa.

Los actos de Santa Elena fueron organizados por la Hermandad de Caballeros de la Santa Vera Cruz y en ellos tuvo un lugar muy destacado el Real Cuerpo de la Nobleza del Principado de Cataluña y Condados de Rosellón y Cerdeña, cuyos miembros estuvieron en la presidencia de todos los actos: procesión, Santa Misa y cena de hermandad, siendo distinguidos al final de la Santa Misa con la corbata de honor de la Hermandad organizadora.

El trato dado a los catalanes presentes, miembros de los linajes más antiguos y primigenios de Cataluña, unos miembros de la nobleza y otros tantos del pueblo llano fue en todo momento exquisito. Y es que la batalla de Las Navas de Tolosa fue fruto de una hermandad de reinos hispánicos que vencieron a un enemigo terriblemente superior y cambiaron el curso de la historia hace 802 años. Allí estaban los catalanes a las órdenes del rey de Aragón, Pedro II el Católico, que no tenía interés territorial alguno en el desenlace de la batalla, como tampoco lo tenían los navarros ni primordialmente fue el interés territorial lo que movía a Castilla. Fue fruto de un impulso moral superior, recuperar la España perdida de la que se lamentaban las crónicas de la invasión sarracena y cuya memoria, la síntesis isidoriana de romanidad, helenismo y cristiandad fue custodiada y preservaba incluso en los territorios invadidos.

De la presencia catalana hay un bonito recuerdo en la Atalaya de Dalmau de Creixell, en la cercana localidad de La Carolina.

Les dejo algunas fotos del acto y la atalaya por si quieren construir una crónica de los actos.

V.I.