Manuel Castells, ministro de Universidades (impuesto por Colau a Sánchez como cuota progresista), está camino de batir récords y pasar a la historia de la democracia constitucional como el ministro con menor número de comparecencias públicas, en rueda de prensa, en comparecencias parlamentarias y en entrevistas en medios de comunicación.
Tanto que, desde que es ministro, ya ha escrito más columnas de opinión en el medio en que siempre ha colaborado, ‘La Vanguardia’, que comparecencias públicas realizadas. Ya es insólito que un ministro mantenga su colaboración en un medio, pero además contrasta con su aversión a los medios y al Parlamento. Desde el mes de enero, ha escrito una quincena de columnas sobre diferentes temas ajenos a su ministerio y, en cambio, solo ha comparecido dos veces en el Comisión de Ciencia y Universidades del Congreso y dos veces en rueda de prensa.
Durante el estado de alarma, cuando el Gobierno organizó una avalancha de comparecencias de ministros, él solo compareció dos veces en la sala de prensa de la Moncloa. Mañana parece ser que reaparecerá PARA HABLAR DEL INICIO DEL NUEVO CURSO, sí para hablar del nuevo curso que ya está empezando. Evidentemente los rectores de todas las universidades se sienten absolutamente desamparados
Por cierto, ya corren rumores de que Pedro Sánchez prepara remodelación de gobierno y el primero en caer será Manuel Castells.
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somatemps.me 
Yo no sé para qué le critican.
Al menos no pone en evidencia un gobierno de inútiles e endiosados.
Y espero que no aparezca por el Ministerio.
Así dejará a los profesionales trabajar en paz.
Respecto a lo demás, el único que decide es Iván Redondo.
Este inútil de Castells ni pincha ni corta.
Sólo es el cupo «progresista» de la Colau y hasta ahora ha cumplido con creces.
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Ya tiene práctica en eso de desaparecer. Ya en los setenta del siglo pasado no aparecía por la facultad ni por equivocación. Eso sí, tenías que comprar su librito y examinarte de él mejor que del Catecismo del Padre Ripalda… Ya apuntaba maneras, el gachó.
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Este camaleón de los espacios universitarios, con sus setenta y ocho años bien cumplidos, que mejor estaría tomando un San Francisco en cualquier terraza pública, está puesto como ministro de universidades, catalogación que no conoce ni siquiera el Sánchez, simplemente porque es un buen socialista. Y eso es porque de siempre fue un buen sociólogo que como tal se ha vendido siempre, porque a fin de cuentas sociólogo es sinónimo de socialista, más él que siempre vendió en su mensajes que no fueron pocos, una sociedad de tilde marxista y sobre todo anti globalización y amigo de los del 15 M, todo asuntos muy concordantes del sentir socialista, y sobre todo el comunista o marxista que tan pocas alegrías le están concediendo a la sociedad española. Si no habla nada relacionado con las universidades españolas que está regentando, es porque es el primero que no sabe qué coño pinta su ministerio en la política española, menos él que es de Albacete y sin embargo comulga mucho con los separratistas catalanes, no porque esté de acuerdo con una autodeterminación para Cataluña, pero sí porque como buen socialista, esta a favor de votar en favor de las causas imposibles, aún que éstas sean la desidia y destrucción del honor, el progreso y el bienestar catalán.
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En estos casos, de personajes tan sectarios , lo único que puede dar en sus apariciones es algún mensaje de odio que desde luego no aportaría nada para este comienzo de curso tan incierto. Así que mejor que esté desaparecido. Hace menos daño.
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SE HABRA IDO CON EL CAMPECHANO PARA QUE NO SE ENCUENTRE SOLO
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¡Paleto envidioso!
¡Estás obsesionado con el Borbón!
Parece que te vivir gustado hacer lo que el ha hecho:
Vivir en un palacio, acostarse con las jóvenes, guapas y ricas que ha querido y que le regalen millones…
Sí, hay clases y clases.
Y tu eres de la clase que ha destruido Cataluña.
Majo, a Cataluña se viene a prosperar, no a destruirla.
Si no te gusta, ¡vuélvete a Córdoba!
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Eso , eso , que se venga para Córdoba. Aquí lo pondrán a reglamento.
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