
Dos semanas ha tardado la fiscalía francesa en reconocer que el ataque de un policía a unos compañeros en una comisaría, que causó cuatro muertos, se trató de un caso de terrorismo yihadista.
La prensa no dio detalles del asesino, Mickäel Harpon de 45 años, como que era y originario de la isla de Martinica -departamento de las Antillas-. La prensa lo presentó como un funcionario del departamento informático, con 17 años de servicio, que mató con un cuchillo de cerámica a cuatro compañeros -tres policías y una empleada administrativa- posiblemente por un problema psiquiátrico.
Pero lo que calló la prensa es que el antillano, se había convertido recientemente al Islam y se había radicalizado. Un policía vecino del mismo edificio (en la localidad de Gonesse), al norte de París, aseguró haber escuchado, de madrugada, gritos de “¡Alá es grande! procedentes del piso del homicida.
Con el tiempo se ha sabido que el mismo día de los asesinatos, Harpon compró un cuchillo de cerámica (no detectable en los controles a la entrada de la prefectura), de 33 centímetros de hoja. Luego envió a su esposa un SMS expresando sus intenciones. Ella le habría contestado con esta frase: “Sólo Dios te juzgará”.
Categorías:Uncategorized
Errata: son dos días no dos semanas
Me gustaMe gusta