
El director de teatro Joan Ollé se ha convertido en la nueva bestia negra del separatismo. En el Nacional.cat (digital separatista hiperventilado e hipersubvencionado) se estiran de los pelos. A Ollé le ha dado por atizar a diestra y siniestra al separatismo, desde su columna semanal en El Periódico.
De momento a A Toni Albà le ha llamado «payaso tonto«, a Lluís Llach, «cantante del régimen«, a Toni Soler «Tuitero Mayor del Reino». Este es su pecado: adjetivar a ciertos independentistas. Los supremacistas -que ya vemos suelen se muy comedidos en su declaraciones y twitters («Bestias con forma humana» somos para ellos)- ahora se sienten ofendidos por cuatro motes bien puestos.
Sin embargo, lo que ha desmelenado al calvo de Antich, ex-director de la Vanguardia y beneficiario de las subvenciones de Elnacional.cat, es un último artículo dedicado a Puidemont, a quien tilda de Tintín en Alsacia. Puidemorrr queda descrito así: «pícaro que el pasado martes volvió a defraudar a su clientela desplazada hasta Estraburgo -que siempre le comprende- argumentando que podría pillarle la muy ‘borrellesca’ gendarmería francesa y eso sería muy malo para la causa«.
Y a sus huestes les tilda de: «multitudinarias romerías posconvergentes a los santos lugares (…). Me costaría felicitar a este colectivo religiosamente orgulloso de representar lo más mejor de la Catalunya auténtica, y, en consecuencia, a sentirse moralmente superiores a la mitad más uno de sus compatriotas«.
Caña al mono.
Categorías:POLÍTICA, SUPREMACISMO
Deja un comentario