Viladamat es una pequeña población de Gerona, cuyo ayuntamiento, gobernado por la CUP, ha enviado este miércoles a la Delegación del Gobierno en Catalunya la bandera española que ondeaba en el consistorio «en vista del desuso que tiene» en el municipio.

Puede enviar su protesta al tontolaba, escribiendo al ayuntamiento:

ajuntament@viladamat.cat

La aldea no pasa de 500 habitantes y se deben creer en posesión de la pócima mágica de Puigdemondix, esa que da una fuerza sobrehumana a los separatistas.

De hecho, el alcalde Robert Sabater Costa, cuando ingiere líquidos preparados por los druidas de la tribu Gabriela, tiene alucinaciones y se pone en su perfil de twitter esta autoimagen:

Aunque en realidad su careto es más banal:

Por lo orondo que está el chico, mucha miseria no debe haber pasado en la vida.

Hemos consultado a nuestro psicólogo experto, y lo ha definido como una garrulillo rural, con ínfulas de justicia social. Muy chuli eso de enviar la bandera del Ayuntamiento a la subdelagación de Gobierno. Ahora bien, tienen una irregularidad en el consistorio, pues esa bandera está inventariada y es propiedad pública.

En fin, sólo queda decirnos a este personajillo que se cree que Viladamat (Gerona) es el ombligo del mundo, que sólo en nuestro bloque y el vecino, superamos con creces a la población de su pueblo. Cuando venga a invadir la Barcelona española, acuérdese de entrar por la Diagonal o la Meridiana, que así no se perderá. Olvídese de las rondas, que son muy complicadas.

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