Una vecina de la Barceloneta graba lo que ni la urbana ni la Colau quieren ver en la Barceloneta.  Marroquíes cometen auténticos delitos por «atentar contra la salud pública». Venden mojitos cubanos y otras bebidas en la playa. Lo preparan  en la calle, en medio de dos coches, y con un material que esconden bajo un container o dentro de una alcantarilla. Según la vecina, cuando vuelven con vasos «sucios, usados», los vuelven a rellenar y a seguir el negocio. Y la Urbana todo el día en la playa dando vueltas como marionetas delante de ellos sin hacer NADA.

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