
El candidato convergente que ha sufrido una sonada bofetada en las urnas es Miquel Calçada (también conocido como Mikimoto o como le llamaban en el cole «Calzada»).
Mikimoto se había pavoneado durante las elecciones que era tan separatista que votaría a ERC, aun estando en la lista al senado de CDC.
Pero el hundimiento de CDC le deja fuera del senado, cosa que ya daba por hecha. CDC durante toda la campaña ha usado la imagen de Mikimoto como una de las ‘vedettes’ más exhibidas para mirar de atraer el voto de los electores catalanistas.
Pues no. De momento tendrá que seguir viviendo de subvenciones, de su productora -cliente favorita de TV3- y de los programas para los que le contrata en el ente público catalán. Con otras palabras, por desgracia seguirá viviendo del dinero público.
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