
Entre el ruido del debate de una hipotética subida de impuestos en Cataluña y los desencuentros dentro de Junts pel Sí, el Parlament aprobó entre intervenciones y mociones sus nuevos presupuestos para el año 2016.
La cámara catalana aprobó con 120 votos a favor y las 9 abstenciones de la CUP las nuevas finanzas de la cámara parlamentaria, que supondrán un gasto de 53 millones de euros.
La subida de las retribuciones de personal que se autoaplicaron los diputados catalanes fueron de un 4,92% respecto al año pasado. Esto significará un millón más de euros sólo dedicados a mejorar los sueldos de los parlamentarios catalanes, en parte por la subida a los salarios públicos del 1% que aplicó Hacienda. También se han convocado dos nuevas plazas de letrado, lo que explica parte del aumento.
Sin embargo, la propia CUP denunció el «escándalo» que suponen algunos sueldos. La diputada anticapitalista Eulàlia Reguant se cuestionó si cuando Junts pel Sí habla de clase media se refiere a aquellos que cobran 100.000 euros anuales, como muchos de sus dirigentes.
Categorías:POLÍTICA
Deja un comentario