El Govern recaudó en el 2015 un total de 140.000 euros en sanciones lingüísticas tras sancionar a 68 empresas, según ha reconocido el conseller Jordi Baiget en respuesta parlamentaria a una pregunta del PPC. Esto supone casi triplicar las cifras del 2014, cuando se recaudaron 51.350 tras sancionar a 57 empresas.

¿Esto es libertad? ¿Esta es vuestra futura República catalana? Vuestro totalitarismo os lo aplicáis a vosotros. Lo único que demuestran las multas lingüísticas es la necesidad que tienen de categorizar catalanes fieles e infieles al poder. Esta es una de las primeras consignas del totalitarismo

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