Los «antisistemas» de la CUP (con celulares iPhone 6) han empezado a diseñar negocios anticapitalistas, ecológicos y sostenibles (por sus familias, se entiende) para superar la etapa poscapitalista global. Primero fue la incursión en el sector de las peluquerías y el estilismo, con gran éxito y notable crecimiento entre los jóvenes y jóvenas alternativos.

https://somatemps.me/2015/11/10/la-cup-impondra-su-moda-si-llega-al-poder-la-pelucup/

Consolidada la franquicia PELU-CUP, se lanzan al sector farmacéutico, en un intento de ampliar mercado en el hemiciclo del Parlament y despachos oficiales.

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