OBSERVATORIO DEL ISLAMISMO: Yihadismo y Cataluña


OBSERVATORIO DEL ISLAMISMO

(artículo ofrecido por Selecto Digital)

 

Por qué no podemos entender el problema yijadista a partir de dos cegueras que podemos pagar caras”, es el título y subtítulo de encabezamiento del potente artículo con el que el blog Dolça Catalunya –artífice de la resistencia más honorable y comprometida contra el desafío independentista catalán- describe los aspectos palmarios y los factores metafísicos del grave problema con el que se enfrenta Europa, y especialmente España y en ella Cataluña: el de la inmigración invasiva de origen mahometano, sea islámico o islamista.

colom1-300x177

Colom inaugurando otra mezquita en Els Monjos (Tarragona)

700.000 musulmanes controlados en la región son muchos, demasiados (en realidad, con los residentes alegales e ilegales, la cifra llega casi al millón). Si añadimos que más de la mitad han llegado en menos de un decenio y que lo han hecho merced a la política de atracción migratoria que puso en marcha el pujolismo mediante instrumentos  institucionales (a costa del erario público) cómo las oficinas de empadronamientoin situ (ergo: en el propio Marruecos), ahora machihembradas con la fundación Nous Catalans, ambas dirigidas por el corrupto Àngel Colom Colom, tránsfuga chaquetero que ha medrado en todos los abrevaderos en los que ha obtenido manduca, amiguitos jóvenes o el dinero negro cash del caso Millet que con su fundación del Palau de la Música financiaba el efímero partido PI, Partit per la Indepèndencia, que cofundó con la ‘bacaladera’ oficial del territorio, un artefacto cagarro (boñiga) escindido de Esquerra Republicana de Catalunya –que además de no conseguir ni un solo escaño dejó pufos por doquier.

1201271704_0

Mezquita, Raval barcelonés

Llegaron los socialistas de los dos tripartitos (socialistas, comunistas e independentistas) y no movieron ficha, dejando que la invasión creciera. Una vez retomado el poder por Convergència i Unió, CiU, con Artur Mas a la cabeza, el flujo de africanos y asiáticos, en un 90% musulmanes, no dejó de llegar en avalancha… y en éstas estamos. De ahí que sea valioso leer el extenso y completo trabajo que no puede dejar indiferente a nadie con dos dedos de frente.

Ante tanta amenaza, pérdida de libertades y peligro contra  nuestra seguridad, lea “Por qué no podemos entender el problema yijadista a partir de dos cegueras que podemos pagar caras” y piense en lo que se expone en él. Lo requiere el momento. Nos va la vida y la de los nuestros.

.:.

La semana pasada un grupo de islamistas asesinó en París a 129 personas. ¿Podría pasar aquí? Cada vez es más verosímil. Recordemos que el pasado 8 de abril fueron detenidos once yijadistas en Cataluña. Cinco de ellos eran catalanes(*) de entre 17 y 45 años -también su presunto jefe- convertidos al islam; por eso una fuente de la investigación afirmó que era “un cambio y un salto cualitativo muy significativo en el avance del radicalismo yijadista en Cataluña”.

mezquita-tarrasa

La de Terrassa, Barcelona

Lo cierto es que son ya casi 40 los islamistas apresados recientemente en nuestra región, que en este aspecto va pareciéndose cada vez más a algunas zonas europeas. El 51% de las mezquitas radicales españolas está en Cataluña. Hay 256 oratorios islámicos (musalas), casi todos sunitas, y en los últimos 10 años han aumentado en un 84%. Las estadísticas de la Generalitat dicen que sólo un 52% de los catalanes son católicos (72% en toda España), hay un 30% de ateos y agnósticos, y un 7% de musulmanes (en Gerona alcanzan el 13%). Entre los menores de 16-24 años el 28% se declara católico y el 14% musulmán. Es razonable pensar que no muy tarde algunas zonas de Cataluña se parecerán a Molenbeek, Malmö o los suburbios parisinos. El problema yijadista está aquí, nos lo hemos traído nosotros y no es sensato cerrar los ojos ante él.

Pero hay dos miopías que nos impiden abordarlo con claridad y eficacia. Por un lado parecemos incapaces de entender el vacío espiritual que aturde a nuestra sociedad, inútil para integrar y seducir a tantos inmigrantes de otras culturas, vacío que nos abandona al vaivén de las ideologías de moda (sea capitalismo, nacionalismo, socialismo o yijadismo). Al director de La Vanguardia, Màrius Carol, por ejemplo, le “sorprende que gentes crecidas en nuestros pueblos y ciudades quieran formar parte de semejante monstruosidad [el Estado Islámico] (…) 5 de los detenidos eran ciudadanos españoles convertidos al islamismo  radical, lo que cuesta aún más de aceptar”. ¡Si somos cojonudos;  si tenemos internet, escuela gratis, TV3 i el Barça! ¿Cómo puede ser que nuestra juventud se haga yijadista?, parece decir Carol.

Pues sí, algo nos pasa; y se parece mucho a un fallo circulatorio intelectual, espiritual y moral, producido por el abandono de la idea de Europa como el ubérrimo fruto de Jerusalén, Atenas y Roma. Europa, el lugar intelectual donde la conjunción de razón, espíritu y civilidad nos hizo personas, parece que ha renunciado a disfrutar de estas verdades y divulgarlas por el mundo.

Por otro lado, insistimos en interpretar y malentender el islam desde la óptica de lo políticamente correcto. Por ejemplo, cuando se produjeron las arriba citadas detenciones en Cataluña la entonces vicepresidenta de la Generalitat sostuvo que vincular islamismo con terrorismo era “una barbaridad, una irresponsabilidad, una falta de criterio absoluto”. También ahora muchos insisten en que la masacre de París no tiene nada que ver con el islam.

Pero el organizador de la carnicería parisina, Abdelhamid Abaaoud, confesaba que “rezo para que Alá rompa la espalda de quienes se oponen a él, a sus soldados y a sus admiradores, y que los extermine”. Sí, esto también es el islam, puesto que en el islam cada imán y cada fiel define el bien y el mal con la guía del Corán, los dichos de Mahoma y el venerado relato de su vida. Allí, junto a episodios piadosos, encontramos recomendaciones de guerras, matanzas y crueldad. Y el Corán no es como la Biblia, palabra de Dios expresada al hombre e interpretable; el Corán es palabra descendida de Alá, inmutable y literal, y no cabe completar la fe con el juicio racional. Además Mahoma es el ejemplo más perfecto del Ser humano para todo musulmán; y no olvidemos que fue un jefe religioso y un implacable caudillo militar, que se dio como misión extender el islam con la espada cuando fuera necesario. Sí: con el Corán en la mano, las acciones del DAESH pueden condenarse o ensalzarse; pwero decir que sus actos son ajenos al islam es una irresponsabilidad que nos oculta la exacta comprensión de lo que sucede.

Para superar la desorientación occidental y los malentendidos sobre el islam es preciso recordar que la sociedad no empieza con la nación, sino con la persona humana y su dignidad; que la razón debe imperar tanto sobre el escepticismo políticamente correcto como sobre el legalismo del Corán; que el César no es Dios, para que ningún poder político (o religioso -va por Vd., obispo Novell) nos obligue a la idolatría nacionalista y para que el totalitarismo islamista no nos asfixie; que la democracia es imposible cuando se absolutiza la ideología de turno o una determinada comunidad política; que la respuesta al concepto distorsionado del bien que tiene el islamismo no puede ser el relativismo que niega la existencia de dicho bien; que la tolerancia es la pacífica paciencia hacia el mal, y no una escéptica indiferencia hacia las diferencias; y, sobre todo, que el mal se vence sumergiéndolo y mezclándolo en el bien, por muy raro que les suene a relativistas y a yijadistas.

colom_ziani_470_470x350

Colom y Ziani

Debemos exigir a nuestros dirigentes que procuren el bien común con valentía y claridad moral. ¿Es normal que sigamos negando nuestro ser, y que sigamos negando la naturaleza conflictiva del islam? ¿Es prudente acoger indiscriminadamente a centenares de miles de refugiados, cuando el mismo embajador sirio en India estima que “el 20% de los refugiados acogidos puede tener contactos con el DAESH”, y parece que dos de los terroristas de París entraron como refugiados en un bote por Grecia? ¿Es juicioso que la fundación ‘angelcolomera’ Nous Catalans (su presidente marroquí, Ziani, fue expulsado en 2011 por estar vinculado a encuentros salafistas en Figueras y Torredembarra) se reúna con centros salafistas para predicar el nacionalismo y captar votos?

Si la Cataluña que quiere la Generalitat exige que 700.000 musulmanes se conviertan en buenos nacionalistas laicos que tomen su religión de Mahoma junto a la política de ‘Junts pel 3%’, es evidente que tenemos graves problemas.

1292790085821



Categorías:MITES NACIONALISTES / MITOLÓGICAS

Deja un comentario

DESPERTA

Red sociocultural