Indultos = Insultos


Humillada España en general y los catalanes en particular, hemos soportado la ignominia de un Presidente de Gobierno que debería pasar a la historia como el “Ejecutor de la Patria”. Tenemos un Presidente, otro más, que desde el gobierno central se empeña en destruir la nación. Podríamos berrinchar, esputar insultos, desgarrarnos las vestiduras cual fariseos, pero no. No es nuestro talante. Y tampoco vamos a echar las culpas a los separatistas y golpistas que propiciaron un referéndum ilegal por que el que son indultados. Si buscamos un culpable, ese -o esos- tiene su aposento en los madriles. Toda la culpa se centra en la dejación, en la permisión, en los pactos secretos o a gritos, en el síndrome del autoodio de la izquierda y el de complejidad genética de la derecha.  

Estos indultos son insultos a la inteligencia y a la prudencia; balones de oxigeno para los que quieren desgajar España. Es la pedagogía aplicada según la cual los actos delictivos y sediciosos no tienen consecuencias. La verborrea de Pedro Sánchez sobre la “humanidad” de los indultos, es contestada por los separatistas en las redes con un “os pasaremos por encima”. Ya lo han hecho. No hace falta ni indultos ni tercer grado. El penoso juicio que se cernió sobre los políticos golpistas ya contenía las claves para que tarde o temprano llegara un indulto, sin arrepentimiento y con la soberbia de los golpistas de que es un favor debido por las “históricas injusticias cometidas contra el pueblo catalán”.

Estos indultos son insultos a la inteligencia y a la prudencia; balones de oxigeno para los que quieren desgajar España. Es la pedagogía aplicada según la cual los actos delictivos y sediciosos no tienen consecuencias.

La vieja teología y el viejo derecho reflexioron, y mucho y bien, sobre los indultos. Para estas sabias ciencias, el indulto es la demostración de que el derecho y la justicia humana tiene sus límites y deficiencias. De que el gobernante o el Rey pueden manifestar la gracia, el don y el perdón como reflejo de la misericordia gratuita de Dios. Los indultos -prueba de esa gratuidad del que ostenta la potestad y la autoridad- eran para ensalzar la misericordia de Dios. Los gobernantes representaban con ellos una analogía de la justicia divina que podía agrandar la justicia con el perdón. El indulto era también una pedagogía para el pueblo que demostraba que la dureza de la ley podía ser suavizada con el arrepentimiento del culpable y la nobleza del gobernante. Pero estos indultos supuran odio a España, humillación al pueblo, y enaltecimiento de los reos y la degradación de la autoridad. Los indultos de los que han atentado contra el estado y su jefatura, son ensalzados como héroes de la libertad. El indulto se ha convertido en un insulto.

Muchos son los que se han quejado de los indultos, una gran manifestación se vio en Madrid. Y entre ellos, también muchos, en toda España, aún corean el “constitucionalismo” contra el separatismo. A ellos hay que decir: este indulto pervertido en sí, es una de tantas expresiones del “constitucionalismo”. El gobierno concede los indultos, pero el Jefe de Estado -que representa la forma monárquica del Estado- está obligado a indultar a los republicanos que pretenden remover su silla. No está mal recordar a los constitucionalistas que la constitución reza que el rey no es responsable de sus actos. De ahí que tiene que pasar ese “trágala”. No está mal recordar el absurdo de una monarquía constitucional que, con la sanción de los indultos, socavará -aún más- sus débiles cimientos. España se autodestruye por el armazón constitucionalista que ha permitido todos los males que nos han llovido. ¿Cómo salvar así España?

Los gobernantes representaban con ellos una analogía de la justicia divina que podía agrandar la justicia con el perdón. El indulto era también una pedagogía para el pueblo que demostraba que la dureza de la ley podía ser suavizada con el arrepentimiento del culpable y la nobleza del gobernante

Siempre hemos defendido que Cataluña no es el problema. El problema está en toda España, en su sistema político, oligárquico y partitocrático, en su Constitución que ha dado cobertura legal al nacionalismo, a su monopolio educativo, a institucionalizar sus mafias y dominar los mecanismos de control social. Pero también los gobiernos de la nación -con sus leyes constitucionales, su Parlamento constitucional, sus partidos “nacionales” y constitucionales-, han deshecho moralmente nuestra sociedad, han traspasado todos los límites humanos y divinos que contenían las miserias que arrastramos los hombres. Nuestra civilizada democracia constitucional ha dejado un cuerpo gangrenado y maloliente. El nacionalismo es parte de esa lepra que se desgaja del cuerpo, pero no es el único mal ni el peor. Es el efecto, no la causa. Así lo hemos dicho mil veces y así lo seguiremos repitiendo.

Sólo pedimos a nuestros gobernantes una cosa: que no nos insulten con su palabrería para justificar los indultos. Parece que casi nos habéis derrotado, pero al menos existe un resto de España que mantenemos intacta la inteligencia y la voluntad de sobrevivir a vuestra lapidaria perversión intelectual, moral y política. El bien siempre estará ahí, hasta el final de los tiempos y no nos apartaréis de él con vuestras falacias y promesas para mentes reblandecidas por el constitucionalismo que vosotros mismos vais a dinamitar. Lo bueno de intentar participar del bien es que la mente es iluminada por la verdad y así ver las cosas como son. Y por eso a vosotros se os puede aplicar aquella condena del profeta Isaías: “sus pastores, son ciegos e ignorantes”, y que luego Jesús echó en cara a los fariseos: “¡Ay de vosotros, guías ciegos”. Repetimos: vuestros indultos son insultos a nuestra inteligencia.

Javier Barraycoa

Publicado en Reino de Valencia nº 130



Categorías:Opinión

5 respuestas

  1. Vivo en un pueblo del Maresme, he sido miembro de mesas electorales varias veces, aparte de ser funcionario y un viejo al que le quedan» 5 días para la jubilación».

    He visto desde mi niñez, como la sociedad catalana ha ido » intoxicándose», con la ideología separatista xenófoba, la aceptación de la doctrina libertaria de suprimir el respeto años padres y a la autoridad, la auto complacencia con la miseria económica producida entre otras causas por la fagocitación fiscal del Estado y Generalitat, y en general el desprecio a nuestros antepasados y a sus creencias ( que no empieza en 1901, con la creación de la infausta Lliga Regionalista).

    El resto de España ídem.

    Los indultos es reconocer lo irreconocible en cualquier Nación civilizada.! Que el Estado se equivocó por defender la CE de 1978 de una panda de delincuentes mafiosos golpistas.

    Señores/as el régimen del 78 está desahuciado y finiquitado en sus principios.

    Sólo VOX ha recurrido, pq sólo él interpuso la querella ante el TS. Quien tenga ojos que vea y entienda.!

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  2. Más que comentario es una radiografía de la realidad.
    Comparto cuanto se dice.

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  3. Suscribo todas las palabras de este excelente artículo de opinión.
    Conocemos las causas de este declive y las solucione a aplicar.
    Ahora nos falta despertar, concienciar, convencer y guiar a millones de nuestros compatriotas.
    Sin unión no hay fuerza suficiente para cambiar estos DESgobiernos infames (central, autonómico y local).

    Somos la última resistencia.
    Semper Fidelis.

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  4. Estupendo artículo de opinión.

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  5. Iván Redondo tiene que explicarnos su estrategia y cuánto ha cobrado por ella.

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