El Govern ha aceptado «la renuncia» de Núria de Gispert a la Creu de Sant Jordi –que se le concedió el martes y aún no había recibido– después de que la expresidenta del Parlament le haya enviado una carta este mismo lunes en la que ponía a su disposición la distinción.

En la carta, ha señalado que esta distinción debe de estar lejos de toda polémica que puedan promover aquellos a quien «les molesta cualquier forma de catalanidad expresada de manera normal, pacífica y festiva».

Sin embargo, también ha aprovechado la misiva para acusar a los medios de «tergiversar» lo que había publicado y de crear un «ambiente proclive a revertir este otorgamiento» de la Creu de Sant Jordi.

La carta llega días después de la polémica porque la expresidenta del Parlament copiara un mensaje en su perfil de Twitter en el que se comparaba a dirigentes de PP y Cs con cerdos. Es lo que tiene ser una conversa al separatismo y convertirse en una «ultramarilla».

En un tuit, la portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha señalado que han recibido la misiva de De Gispert y que le agradecen la renuncia: «Un gesto que la honra y avala su trayectoria de compromiso con las instituciones de Catalunya».

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