Como la sinceridad es tan seductora, Omella nos ha abierto su corazón con respecto al problema de los inmigrantes, y nos confiesa los prejuicios, el miedo, la desconfianza y la mucha pereza que comparte él con los demás cristianos. El pastor y las ovejas sufren de lo mismo: es un pastor que huele a oveja y no tiene ningún recato en manifestarlo. Y lo hace ante la hipersolidaria y seductora Ada Colau, que le da lecciones a la Iglesia en la persona de Omella, de cómo hay que acoger a los inmigrantes: No podemos normalizar que se produzca un dolor tan cruel y unas muertes que son evitables y que está en manos de Europa el hecho de poder evitarlo, dijo en un alarde de conciencia y de elocuencia. Es que en conjunto la política europea no ha estado suficientemente a la altura y se siguen produciendo estas muertes en nuestras fronteras. Y todo el mundo silenciando que buena parte de ese movimiento migratorio es consecuencia de las primaveras árabes y de las guerras que han promovido y provocado Europa y los Estados Unidos en África y Oriente Medio.

Es que no nos engañemos, lo del Aquarius es muy goloso. Cada semana llega a nuestras costas más de un Aquarius. Pero como ahí estaba la tele enfocándolo, todos, alcaldes y obispos se quisieron hacer la foto con él, junto al avispado Pedro Sánchez, aunque unos y otros y los de más allá pasen solemnísimamente del resto de pateras que llegan a nuestras costas (y a nuestros corazones, añadiría Omella) día sí y día también, sumando decenas de miles de inmigrantes cada año. Pero no son tan fotogénicas…
¡Pero qué boda sin la tía Juana (sin el tío Juanjo)! ¿Cómo se iba a perder nuestro Juanjo una oportunidad así? Inmigrantes en patera los tenemos todos los días, pero inmigrantes en patera VIP son una gran oportunidad (que decían a dúo Ada y Omella) que se necesita ser bobo para perdérsela.

Colau, Omella y Francesc Torralba

Y en efecto, el Arzobispado, en un gran alarde de oportunismo, sacó un número especial de Qüestions de vida de la Fundación Joan Maragall, dedicado a la acogida de los inmigrantes por parte de la Iglesia. Son muy avispados, esta gente: “obispados” decimos en Calanda. Dicho y hecho: nuestro cardenalico, más “obispado” que nadie, lo sacó y lo exhibió públicamente, con cámaras y todo, participando en esa presentación, como invitada especialísima y oportunísima la más ferviente acogedora de inmigrantes VIP (no llegan a un centenar, no os vayáis a pensar). Lo sabemos porque estas cosas las hace a bombo y platillos. ¿De qué le serviría si no? La alcaldesa de Barcelona, la misma que premió el padrenuestro blasfemo y obsceno ante el silencio prudentemente prolongado del arzobispo Omella, la misma que promociona y disfruta del lobby LGTB, la misma que como hiperfeminista promueve el aborto libre y la ideología de género desde la más tierna edad, impartió lecciones de moralidad y de “valores fundacionales de la vieja Europa” urbi et orbi; pero sobre todo al Arzobispo, que como bien muestra la foto, se dejó encandilar por la exuberante oratoria y por el gran atractivo de la alcaldesa.

La entrada en el salón de plenos magnífica, Paco Torralba, el profesor, engolado como casi siempre -será por su nivel de especialización-, la Colau con todo su desparpajo horizontal avanzando por el pasillo central como una reina y D. Juan José… ¡Pobre D. Juan José!, caminando de lado, cual comparsa, en un extremo del corredor, arrastrando su dignidad episcopal por todos los bancos que rozaba a su paso… El jefe de protocolo -municipal y eclesiástico- se lució con el Cardenal-arzobispo. Seguro que el ujier hubiera entrado con un poco más de compostura. Será la proverbial discreción de Omella… tanta que hasta llevó escondida en el bolsillo de la camisa, durante todo el acto, la cruz pectoral que debiera lucir en su pecho con la humildad y el legítimo orgullo de Obispo de la Iglesia Católica y pastor de su pueblo.

Bah, pero eso son nimiedades que sólo importan a los fariseos interesados en la casuística y en los ritos… Porque, a pesar de todo y de todos, la complicidad de D. Juan José con la frondosa Ada se hizo manifiesta a través de todas esas miradas tiernas y esos gestos cómplices, que les convertían en una especie de dúo musical al estilo de Albano y Romina…, si tuviesen algún tipo de preparación no ya teológica ni musical, sino simplemente cultural. Porque el nivel de sus ideas y hasta de sus construcciones sintácticas delataba el nivel académico y la cercanía de ambos…  D. Juan José: ¿Qué necesidad tenía usted de hacerle la campaña electoral a la Colau? ¿Qué necesidad tenía de embellecer la caducada imagen de la Sra. Alcaldesa? ¿Tal vez está usted deseando votarla en las próximas municipales? En Calanda no nos extrañaría nada. El talante conciliador, sumador y evitador de conflictos de D. Juan José puede llegar hasta el paroxismo más chusco.

Seguramente en esta ocasión, junto a Omella -mano a mano- se ha cumplido aquello que twiteó el otro día la alcaldesa: En el sistema patriarcal, heteronormativo y capitalista necesitamos esos espacios donde encontramos complicidad, pero tenemos el reto de hackear el sistema para que todo el mundo pueda ser libre, feliz y vivir sin miedo en nuestra ciudad. Sí, sí… Libres como tú, Ada, hackeando el sistema patriarcal y heteronormativo que representa D. Juan José Omella, si todavía quiere representar algo o a alguien.

Lo que está claro es que, junto a la Colau, una mujer bisexual, pobre y de familia humilde -como ella misma se define-, a la que tantos desprecian por ello y que encuentra a faltar el amor de muchos -como ella misma denuncia-, está con el corazón en la mano el Arzobispo y Cardenal Primado de Cataluña. Se sentirán almas gemelas… Omella, también pobre y de familia humilde y sin currículo académico. Y Ada, que ha llegado a ser alcaldesa de Barcelona, y que -dice ella- ha generado muchas situaciones de disrupción y emociones por estar donde no se espera. ¡Quién lo dijera! En el Ayuntamiento… ¡del bracico de D. Juan José! Lo decimos por aquí: Dios los cría y ellos se juntan. Las risicas de conchabanza del afoto lo dicen todo. 

El Cojo de Calanda

Fuente: Germinans Germinabit

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